Guadalajara.— Las Águilas llegaron a tierras tapatías acompañadas. El equipo América ingresó a su lugar de concentración cerca de las seis de la tarde, pero los seguidores aún no habían arribado.
Aunque la llegada de los cremas fue acompañada por algo más de 100 aficionados. Esta cantidad se duplicó casi una hora más tarde, después de que la barra oficial de los amarillos en Guadalajara convocara a lo que poco a poco se está convirtiendo en una tradición, la serenata previa al encuentro.
¡El capitán hizo su aparición!
Henry Martín se unió a la serenata y expresó su gratitud por el apoyo de la afición antes del enfrentamiento contra las Chivas
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— Esto en Línea (@estoenlinea) May 15, 2024
: La espera se hizo larga, la gente se mantuvo paciente, mientras los jugadores cenaban, veían vídeos de reconocimiento y se recuperaban del viaje desde la ciudad de Toluca, en un trayecto que prácticamente duró cuatro horas desde Coapa hasta la Perla Tapatía.
Los cantos empezaron a escucharse poco después de las siete de la noche
El tráfico no se detenía ante la cantidad de seguidores del América presentes en el lugar. Saltos, ánimo y el deseo de ver a los futbolistas aumentaron a medida que el tiempo pasaba.
¡La espera tuvo su recompensa!
Los jugadores del América salieron del lugar de concentración para agradecer el respaldo de la gente antes del partido de Liguilla contra las Chivas
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La alegría iba disminuyendo a medida que los jugadores se asomaban por una ventana. La gente mostraba su apoyo, mientras el personal de seguridad se mofaba con la idea de que los jugadores no saldrían.
¿Qué está sucediendo?
Un miembro de seguridad del hotel donde se aloja el América en Guadalajara comenzó a incitar a los seguidores de las Águilas durante la serenata
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El primer piso reveló las siluetas de algunos protagonistas. Álvaro Fidalgo, Jonathan Dos Santos y Henry Martín se destacaron. “Que bajen, que bajen”, solicitó la concurrencia que creció de manera repentina.
Sorprendentemente, un balcón se abrió a un lado del hotel y los futbolistas empezaron a asomarse. Encabezados por la Bomba yucateca y acompañados por Julián Quiñones, las Águilas se entregaron a sus seguidores, quienes alentaban entusiastamente mientras los jugadores agradecían el gesto.
La unión fue completa
Martín expresó su agradecimiento y junto al resto del equipo empezaron a ingresar al interior del edificio, mientras los seguidores se dispersaban paulatinamente. Así concluyó su preparación América, con la comunión inquebrantable con la que consideran su segunda casa, la ciudad donde reside su más grande rival, el Guadalajara.
